Educar en el país de la pluralidad
En Colombia, el 10 por ciento de la población es de raza afro y el tres por ciento pertenece a la etnia indígena. En el país cerca del 10 por ciento de la población ha sido desplazada de sus tierras por la violencia u otros factores; seis de cada 100 colombianos viven con algún tipo de discapacidad cognitiva o física; el 70 por ciento son pobres, y se estima que el 10 por ciento de la población colombiana pertenece a una minoría sexual.
En el país convive una multitud de razas, idiomas, culturas, religiones, clases sociales y otras. Todas, sin excepción, tienen los mismos derechos, incluido el derecho a una educación. Y es que así como se configura el país, se conforman los salones de clases en colegios y universidades.
Desde hace más de 40 años, la Fundación Saldarriaga Concha ha soñado con transformar a Colombia en una sociedad en la que haya lugar para todos. En su camino encontró que la educación era uno de los vehículos ideales para esta transformación. Ha asesorado proyectos en escuelas para una educación inclusiva más allá de la discapacidad en diferentes regiones del país.
A través de asesorías y trabajo con colegios y escuelas, esta organización ha abogado por una educación inclusiva, un término que por lo general se asocia a discapacidad, pero que abarca factores tan variables como estilos de aprendizaje, condición social, calidad, limitaciones cognitivas, pertinencia, entre otras.