Una escuela pública de calidad para todas las personas. Día Internacional para la Erradicación de la Pobreza – 17 de octubre
Hoy, 17 de octubre, hace exactamente tres décadas, en 1987, en la plaza Trocadero, en París, se congregaron más de cien mil personas para proclamar que la pobreza es una violación de los derechos humanos y afirmar la necesidad de aunar esfuerzos para garantizar condiciones de vida digna a todas las personas.
Desde ese día, cada 17 de octubre, desde organismos internacionales y organizaciones sociales se visibiliza la importancia de aunar esfuerzos desde diferentes ámbitos de nuestra sociedad, administraciones públicas, empresas, así como desde la sociedad civil organizada para impulsar tanto políticas públicas como iniciativas privadas que permitan acabar con la pobreza y la discriminación, de manera que se posibilite construir un futuro sostenible en el que se satisfagan las necesidades actuales sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras.
A día de hoy, en 2017, sigue vigente y pendiente en nuestra sociedad el objetivo de no dejar a nadie atrás y se pone la mirada en el futuro: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible aspira a erradicar la pobreza para el año 2030. Con este fin en el horizonte, las exigencias son claras: los gobiernos deben actuar rápidamente y traducir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en políticas eficaces respaldadas con los recursos adecuados.
El trabajo realizado a lo largo de los últimos treinta años ha permitido integrar las dimensiones sociales, económicas y medioambientales de cara a la erradicación de la pobreza de manera que se hace necesario adoptar medidas integradas que abarquen las distintas esferas políticas, aprovechando al máximo las capacidades y los recursos a través de políticas específicas concebidas para agilizar los progresos en todos los ámbitos.
En este sentido, desde AULA INTERCULTURAL consideramos necesario destacar el papel clave que debe desempeñar la educación. La educación es un motor de cambio capaz de transformar la realidad social, de manera que es esencial garantizar el acceso a este servicio social básico a través de una red pública, así como también se hace indispensable la adquisición de los conocimientos necesarios que nos permitan construir centros educativos inclusivos. Para este fin, de adquirir conocimientos de calidad, desde AULA INTERCULTURAL este 17 de octubre consideramos fundamental destacar el trabajo realizado por Adela Cortina en Aporofobia, el rechazo al pobre.
En este ensayo se señala que las personas extranjeras con medios no producen rechazo, sino todo lo contrario, porque se espera que aporten ingresos y se les recibe con entusiasmo. Sin embargo, las personas pobres sí que inspiran desprecio porque parece que no pueden ofrecer nada bueno, bien sean emigrantes o refugiados políticos. Adela Cortina nos explica la predisposición que tenemos a esta fobia, una fobia que no tenia nombre y para la cual ella acuña el término «aporofobia», al mismo tiempo que propone caminos de superación a través de la educación, la eliminación de las desigualdades económicas, la promoción de una democracia que tome en serio la igualdad y el fomento de una hospitalidad cosmopolita. Una reflexión imprescindible y una herramienta clave para la comunidad educativa de cara a su labor de transformación social.
Para erradicar la pobreza necesitamos exigir una escuela pública de calidad, con información y contenidos que nos permitan abordar la realidad desde su complejidad de manera que además se facilite y promueva una mayor participación de la comunidad educativa, la implicación de mujeres y hombres, y de la gente joven serán la clave del éxito para que más pronto que tarde las todavía promesas sean una realidad.