El Ayuntamiento de Móstoles ayudará a los alumnos que no pueden pagar las tasas de selectividad
El Ayuntamiento de Móstoles, gobernado en coalición entre PSOE y Unidas Podemos, ha decidido hacerse cargo del pago de las tasas de Evaluación de Acceso a la Universidad (EvAU), la antigua selectividad, de los menores vulnerables que no pueden pagarlas en un instituto de su localidad. Este martes por la mañana —después de leer la noticia en este periódico sobre la colecta que unos profesores estaban realizando para pagar el examen a tres alumnos de su instituto— el Consistorio se ha puesto en contacto con varios centros para dar con el que ha dado a conocer este problema. La sorpresa ha sido que no pasa en uno solo, sino en varios, y ha decidido habilitar ayuda de emergencia social a través de Servicios Sociales. Los centros aportarán los datos de las familias de estos chicos y se pondrán en contacto con ellos directamente. Las competencias en Educación, en todo caso, pertenecen a la Comunidad de Madrid, que respondió a la petición de auxilio del centro por escrito explicando que este curso “no se incluía ningún supuesto nuevo de reducción de las tasas diferentes a los que ya existían”.
Los supuestos a los que se refería la Administración son los que vienen recogidos en el artículo 20 del Real Decreto 83/2016, que especifica que los alumnos de familia numerosa se beneficiarán de las exenciones. También lo harán las víctimas de terrorismo, sus cónyuges e hijos y los estudiantes con discapacidad. Los que pertenecen a familias vulnerables o en exclusión social, por tanto, no tienen posibilidad de beneficiarse de ninguna beca o rebaja, ya que no se consideran tasas académicas, que son las que cubren las becas, sino administrativas.
Noelia Posse, alcaldesa de Móstoles, se ha comprometido a que su gobierno asuma el coste de las tasas “aunque esta competencia corresponda a la Comunidad de Madrid y al Gobierno de Díaz Ayuso” y lo harán recurriendo a ayudas de emergencia social. “Estudiaremos también la manera de crear un fondo específico para pagar tasas educativas en un futuro”, ha asegurado. Natividad Gómez, concejal de Educación del municipio del sur de Madrid, ha asegurado que, al conocer la noticia, se han intentado poner en contacto con varios centros para ofrecer su ayuda. “Nos preocupa esta situación y haremos lo posible para que ningún chico se quede sin estudiar”, ha explicado. Aun así, ha insistido en que las competencias pertenecen a la Administración regional y ellos deberían tener “más sensibilidad” con estos temas. “Llevamos toda la pandemia haciendo estas cosas”, ha dicho. Se refiere a que el Ayuntamiento donó el curso pasado 119 tablets con conexión a internet a los alumnos más desfavorecidos del municipio “para evitar la brecha digital” y contrató los servicios de la empresa Mediterránea Catering para evitar que los que disponían de la beca comedor se alimentaran de los menús polémicos de Telepizza y Rodilla durante la primera ola de la pandemia.
Leer el resto del artículo en El País.