«El patio es un escenario de teatro y los niños saben perfectamente que es una ficción del mundo futuro»
Los espacios de la educación formal han sido protagonistas de varias películas de la directora Claire Simón. Desde las relaciones entre niños en el patio escolar a Recreation (1998), hasta las disputas del proceso de admisión a una de las escuelas de cine más prestigiosas de Francia de Le concours (2016), pero también las confesiones de los adolescentes en los pasillos del instituto de Premières solitudes, el filme que estrenará en España en otoño.
Claire Simon, nacida en Londres en 1955 pero que ha hecho vida en Francia, intenta captar, desde el género documental pero con imagen de ficción, la esencia de la realidad. Con motivo de su invitación a la 27ª Muestra Internacional de Filmes de Mujeres, reflexionamos con ella sobre la socialización y la educación de los niños y jóvenes.
¿Por qué es importante para usted reflejar espacios educativos en el cine?
Es casualidad que aparezcan espacios educativos tantas veces, en realidad. Tenía una intención diferente en cada película. Recreation, por ejemplo, la hice porque era la edad de mi hija. Acababa de entrar en la escuela y quedé muy impresionada cuando vi lo que pasaba en el patio. Pensé que si se las podía arreglar en ese patio, ¡le iría muy bien todo en la vida! Para mí era muy importante ver cómo los niños jugaban y las historias que buscaban. Comprendí inmediatamente que el patio es como un escenario de teatro donde los niños saben perfectamente que es una ficción del mundo futuro. Una «recreación».
¿Eran como juegos de rol?
No exactamente, porque los juegos de rol son cerrados, están preparados. En cambio, las situaciones en el patio donde cada niño entrega su personalidad y sentimientos tan fuertes me interesan más. Hay el juego, pero también la humillación, la violencia, el deseo del conflicto… Se pelean pero no se tocan mucho porque quieren saber cómo continuará la historia que ha funcionado entre ellos. Y las historias que crean son muy interesantes.
Y en ese momento, ¡también eran las historias de su hija!
Para mí era muy importante grabarlo entonces porque era la edad de mi hija, pero también porque pienso que el secreto de nuestra vida está en la infancia, en la primera infancia. Hay una infancia que hemos olvidado y que quienes son ahora niños también olvidarán. Al principio lo hice por mí misma, que no pasa por el deseo de responder a ninguna gran pregunta educacional. Sólo quería reflejar el inicio de la vida y la forma en que los niños entienden la sociedad, las relaciones de poder y seducción, y los sueños.
Cuando filmé Recreation, el director de la escuela y las maestras me dijeron: «Nadie ve lo que tú has visto. Sabemos que esto existe pero, incluso nosotros, no lo vemos». ¡Es importante enseñar lo que el resto de gente no ve!
Leer el resto del artículo en El Diario de la Educación.