Más allá de la música: Érik Aliana y Picket de Camerún, en Barcelona
“Si perdemos la cultura, perdemos la riqueza”
Paseamos por los barrios de Barcelona, y los cantos y danzas surgen espontáneos tras la marcha. Y es que Érik Aliana lleva la música en el interior de su Ser, de donde emana con su talento y con la sinceridad de sus palabras. A su paso, el cantante camerunés multiinstrumentista interactúa felizmente, tanto con músicos de la calle, como con personas jugando al ping-pong en una Plaza de la Barceloneta, a las que les pide compartir una partida. A la brillante gama de su voz única le acompaña el bajista Picket. Ambos, forman un dúo de sonoridad musical con gran complicidad y son dignos de ser vistos en el escenario. Ya en el ensayo de sonido hacen vibrar a los espectadores: los transportan más allá de la música, una música que conecta desde lo tradicional hasta lo universal. Los korongos (guitarras) y percusiones tradicionales se acompasan con sus voces. Voces que narran temas desde el patrimonio ancestral y cultural de su país hasta la destrucción que provoca la fabricación de las armas.
-¿Cómo aprendisteis el arte de la música? ¿En qué se inspira?
Érik – En nuestra juventud, cuando empezamos a tocar música, estábamos inspirados en la vida local, en la manera de ser de nuestro pueblo, en los ancianos. De niños aprendimos las cosas que existen en nuestro hogar, la forma de vivir, de cantar. Yo quería transmitir la manera de entender el respeto, los valores, ciertos ritos y danzas, las relaciones con los padres y la familia, con la naturaleza y de la forma que hablamos de Dios, quien es más grande que la religión. Amaba la música, mas no sabía que sería músico. Mi padre quería que fuese médico o abogado. Pero empecé a cantar en mi tierra natal, en Camerún. Yo diría que no es exactamente música tradicional. Si los occidentales van a las regiones donde las personas tocan los tambores desde hace miles de años y lo registran, lo pueden transformar en música moderna con las tecnologías. La música es la pulsión, y la que hacemos nosotros es la música primaria.
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