Inmigración y Escuela. Una perspectiva sociológica

COLECTIVO IOÉ
Por Walter Actis

Este artículo fue elaborado con motivo del seminario «La formación del profesorado en educación intercultural», que se celebró en Barcelona, en junio 2002, organizado por FETE-UGT.

Ajustándonos al título de la comunicación que se nos ha solicitado, nos referiremos a la situación del alumnado de origen extranjero en el sistema educativo español. Sin embargo, somos de la opinión de que la educación intercultural no debería estar ligada necesariamente a la presencia de alumnado extranjero en los centros, puesto que la diversidad cultural no se limita a la extranjería. Lamentablemente, en la práctica en el caso español sólo a partir de la presencia de inmigrantes ha empezado a plantearse la cuestión. Esta circunstancia produce una carga (simbólica y práctica) que condiciona de forma importante las actitudes del profesorado. Sobre estas cuestiones volveremos brevemente al final del artículo.

Nuestro objetivo es mostrar las características de la evolución del alumnado extranjero en el sistema escolar no universitario, a lo largo de una década. Se trata de prestar atención no sólo a su magnitud sino también a sus características diferenciadoras, como la nacionalidad, el sexo, el lugar de residencia del alumnado, o su inserción en el sistema escolar (nivel educativo, titularidad del centro). Para ello utilizamos las estadísticas elaboradas por las administraciones educativas autonómicas, referidas al alumnado extranjero, y publicadas por el Ministerio de Educación, anualmente, en las Estadísticas de la Educación en España. Estos datos tienen algunas limitaciones , pero la ventaja de conocerlos y analizarlos son evidentes, puesto que nos permiten trascender las imágenes impresionistas, derivadas de nuestra experiencia particular y/o del impacto de los mensajes mediáticos, para elaborar un panorama más global y «objetivo».

1. El alumnado autóctono disminuye mientras aumentan los de origen extranjero. Pero estos siguen siendo una pequeña minoría

La natalidad en España ha descendido de forma notable durante los últimos veinte años. Una de las consecuencias de este cambio en los comportamientos demográficos ha sido una disminución de la población en edad escolar. Dicha tendencia queda reflejada en la evolución del total de alumnos matriculados en las enseñanzas no universitarias entre los cursos 1991-1992 y 2001-2002. La cifra pasó, en cifras redondas, de 8.200.000 alumnos a 6.630.000; es decir que en diez años se produjo una disminución de 1.575.000, cifra equivalente al 19,2% del alumnado existente en 1991. Puesto que la natalidad en la sociedad española continúa siendo una de las más bajas del mundo, esta tendencia decreciente continuará a corto y medio plazo.