ESCUELA INFANTIL VERBENA. Leganés, Madrid

Cuentos, imaginación y creatividad para enseñar a los más peques

Un trabajo diario en solidaridad, respeto y empatía

Al entrar en la Escuela Infantil Verbena, en Leganés, al Sur de Madrid, a una le invade una agradable sensación propia de encontrarse en un lugar acogedor y lleno de vida. Las paredes están pintadas y decoradas con toda clase de murales; y nada más entrar, la biblioteca aparece abierta y accesible, con sillas pequeñitas que invitan a pasar y cotillear todo el material bibliográfico. Afuera, a través de la ventana, se puede ver el jardín, cuidado, con un pequeño invernadero repleto de herramientas para trabajar el huerto que, a su lado, espera a ser sembrado por todos los mini-habitantes de este centro que ha sido catalogado como eco-escuela. Aparece Teresa, maestra del centro, y me lleva a su despacho, donde me va a contar el trabajo que realizan las seis unidades docentes desde que la escuela empezó su andadura allá por 1992. Primero me habla de los Proyectos de Centro, que realizan cada año y para los cuales suelen recibir alguna subvención del Ayuntamiento de Leganés o de la Comunidad Autónoma de Madrid. Son proyectos centrados en temas específicos ('Agua va'- centrado en el agua- 'El Mago Majareta'- con el que se empezó a trabajar el Huerto-, o 'el Notición'-con el que se hizo un periódico en la escuela, son sólo algunos ejemplos). Y entre ellos, 'Viva la diferencia', el proyecto que me ha traído hasta aquí, investigando de qué manera se trabajan los temas interculturales en una escuela del extrarradio de Madrid.

Teresa parece una mujer que se cree su trabajo y disfruta con él. Durante una mañana me enseña fotos, carteles, y materiales realizados. También me cuenta proyectos y actividades repletos de anécdotas, recuerdos y futuros planes. En la escuela no existen sólo los Proyectos de Centro.

Estos son importantes y se les dedica, entre preparación, actividades, teatros, cuentos y talleres, un trimestre largo. Además, involucran a toda la comunidad educativa y las familias son parte, como sujetos activos, de los mismos. Son, sin duda, muy interesantes. Pero la Escuela Verbena tiene mucho más que voy descubriendo del relato de Teresa. Sus palabras desbordan ilusión por un trabajo que nunca deja de sorprenderla.

Las personas somos diversas, pero tenemos mucho en común: un enfoque de centro

El trabajo de la diversidad cultural y el respeto a las diferencias de todas las personas no surgió en la Escuela Verbena como una necesidad tal y como se plantea en otros centros. A diferencia de muchas escuelas, colegios e institutos de Madrid, en Verbena hay muy poco alumnado extranjero. De un total de 117 niños y niñas, actualmente sólo hay uno nacido fuera de España. Y aunque se tenga en cuenta a los hijos de familias migrantes, que son españoles pero con una cultura familiar distinta a la mayoritaria en Madrid, se contabilizan alrededor de 10 en toda la escuela. Y sin emabrgo, Teresa enfatiza: "hay que partir de que todos somos diferentes, es que no hay que buscar a veces más diferencias ajenas, porque ya lo somos. Es darse cuenta de la diversidad de nuestras aulas, sin tenter que buscar fuera". Además, reconoce, los alumnos de la escuela cuando pasan a Primaria sí que se encuentran con compañeros gitanos y extranjeros que en ocasiones levantan recelos entre las familias o entre los propios niños y niñas. Es por todo esto por lo que el enfoque de la diversidad, el respeto a la diferencia y la eduación en valores se desarrolla en la escuela como una seña de identidad desde el principio, con independencia de los proyectos o actividades que se hayan realizado.

"Trabajar a partir de propuestas que hacen los niños y niñas"

De los aspectos educativos que Teresa relata, uno de los que más llama la atención y en el que más énfasis pone mi relatora es la metodología. Flexible, cambiante y participativa. Porque el alumnado de Infantil, aunque muy pequeño, también tiene su propio criterio y toma decisiones en lo que respecta a su trabajo diario según sus intereses..

Por eso en la Escuela Verbena no hay libros de texto, como ocurre en muchos centros educativos de esta edad, pero tampoco hay un guión claro de temas que se vayan a trabajar a lo largo del curso, ni una programación general de lo que se va a trabajar cada día. Sí que hay fechas señaladas (como el Día de los Derechos de la Infancia, el 20 de noviembre, o el Día de la Paz, el 30 de enero) y temas obligados que el centro se propone abordar porque al equipo docente le interesa y quiere trabajarlo. También hay tareas fijas (como el material sobre la granja que se trabaja después de las visitas de cada año).

Pero cada aula y cada ciclo es un mundo, y en cada uno de esos mundos se espera que surjan otros temas a propuesta de los propios niños y niñas. "Con el Proyecto 'Viva la Diferencia'"- ejemplifica la mestra- "aunque teníamos muchas cosas preparadas luego salieron muchas propuestas en las clases. El tronco era el mismo, pero luego cada aula tiró por unos derroteros. Como las profesoras nos reunimos, lo ponemos en común y nos vamos contando las cosas que hacemos". Y de esta manera vienen funcionando muchos años. Y parece que funciona bien...

La Educación en Valores, una rutina educativa

El trabajo intercultural propiamente dicho se concentró en el curso 1998-99 con la realización del proyecto a nivel de centro 'Viva la Diferencia'. A través de todos los talleres y actividades que se realizaron (cuentos del mundo, murales, juegos y músicas del mundo, jornadas de puertas abiertas, exposiciones, salidas, etc.) se trabajaron principalmente las actitudes de tolerancia, solidaridad y empatía. No eran cosas nuevas, repite una y otra vez Teresa, porque están incluidas en el Proyecto Educativo del colegio como una de sus señas de identidad desde el principio. Pero ese año se abordaron en forma de proyecto, lo que implica que se investigó, se buscó información, los y las docentes se formaron... "y todas esas cosas ya quedaron para siempre". Entre otras, el enfoque, que Teresa me explica, entretenida:

"El enfoque era no que el Otro tiene el problema, sino desde el principio, vernos a nosotros mismos. Hicimos un trabajo precioso de los cuentos que nos gustan de la biblioteca. Trabajar la diversdiad y siempre con el mismo final: 'y sin embargo somos amigos' 'nos diferencian unas cosas, pero otras las compartimos'. El proyecto era VIVA LA DIFERENCIA. TODOS IGUALES, TODOS DIFERENTES. Era siempre un ida y vuela. Ver en qué éramos diferentes, pero volviendo a lo que nos une."

El trabajo durante el curso 1998-99 sirvió al profesorado para entender muchas cosas: aprendieron a cuidar el lenguaje, a conocer realidades diferentes, a tomar una conciencia y una sensibilidad especial sobre estos temas. Aprendizajes todos ellos que hoy se mantienen y se continúan en la escuela. A través de cuentos, de fichas, de actividades espontáneas... En este punto Teresa recuerda con una enorme sonrisa en la cara la experiencia que vivió en una de sus aulas:

"Hace unos años tuvimos una niña deficiente visual y se hicieron muchos trabajos, cuentos, etc., para toda la clase, no específicos para ella. Todos los niños hicieron las letras de su nombre en Braille cuando ella empezó a escribir. Venía a apoyar una hora a la semana una persona de la ONCE que nos ayudó en estas tareas. Con ella en la clase se trabajó y nos hizo los nombres de todos los de la clase con pegatinas de alfabeto braille para que todos los niños supieran las letras. Yo busqué los número en Internet y también los hicimos en pegatinas... Se trata de aprovechar el momento y convertir lo que parece especial y diferente de cada uno, en algo que pase a ser parte de todos". Y continúa: "Es como con las alergias. En la medida de lo posible, en fiestas, cumpleaños, etc., en vez de comprar cosas especiales para los que tienen alergias, comemos todos la comida especial. Entonces no hay nadie que sea 'diferente'." Son medidas y actuaciones que implican, a la fuerza, el desarrollo de actitudes de empatía, solidaridad y respeto.

Trabajando los Derechos de la Infancia

Uno de los trabajos que sí ha quedado establecido y que se aborda año tras año es el de los Derechos de Niños y Niñas. Desde hace tres cursos, se trabaja el 20 de noviembre a través del Programa 'Kilómetros de Solidaridad' de Save the Children, el cual conocieron a través de algunas familias del centro que colaboran con la ONG. Se trata de un programa en el que se involucra tanto el centro como las familias y que cada curso gira entorno a un país. Save the Childre propone el material y el contenido y cada centro lo adapta a su manera. Teresa nos cuenta cómo lo hacen en su escuela: "

1. Aprovechamos el material que ellos nos ofrecen (este año será sobre Níger; el año pasado fue sobre República Democrática del Congo). Nos han mandado unas revistitas con unas propuestas pedagógicas para infantil, para primaria... y te mandan uno dorsales adhesivos. Nosotros nos apuntamos y ellos nos envían los paquetes.

2. Nosotros nos reunimos y vemos cómo lo hacemos cada año. Cogemos los materiales, que son a través de un personaje (este año es Irbrahim). Son mensajes telegráficos: 'Ibrahim tiene cinco hermanos', 'Ibrahim vive con su madre'... Nosotros recibimos esos mensajes y los trabajamos en clase. A partir de ahí hacemos una comparativa: cómo vive Ibrahim y cómo vivimos nosotros. Si te cuenta cómo es la casa de Ibrahim, pues cómo son las nuestras. Si tiene cinco hermanos, cuántos tenemos nosotros. Hacemos la comparativa para analizar qué es lo que le faltaría a Ibrahim y qué es lo que nos sobraría a nosotros, y viceversa. A ellos no sé si les sobra mucho, pero desde luego que a nosotros nos falta y también nos sobra... Nos centramos en ver cómo vivimos nosotros y si es necesario vivir así. Y eso tiene que terminar con alguno de los derechos de la Infancia. Por ejemplo, el derecho de ir a la Escuela: 'Todos los niños y niñas tenemos derecho a una educación...' Otros a una sanidad, a tener cariño, etc.

3. Ese es el trabajo previo, y luego es la carrera de 'Save the Children', el día 20 de noviembre. Tenemos una pancarta guardada de salida, que la han hecho las familias. Hacemos la carrera en horario escolar pero vienen muchas familias, vienen bastante y muchos abuelos también. Vienen a correr con nosotros. Hacemos un poco de folcklore, con banderitas y eso: primero los pequeños, dan una vuelta al cole mientras los otros animan; luego los de segundo y tercero, lo mismo. Después, salen los de cuarto... Y luego ya nos vamos todos juntos con las familias. Al final recogemos dinero 'X' (cada uno lo que quiera) para la carrera, y luego los padres que vengan a correr pagan por el dorsal. Y ese dinero va para el proyecto de Save the Children."


CUENTOS PARA FOMENTAR LA EMPATÍA Y EL CONOCIMIENTO MUTUO

El cuento es una herramienta privilegiada para trabajar con alumnado infantil. Se puede desarrollar de múltiples maneras: mediante Cuenta Cuentos, cuentos colectivos, fichas de trabajo individuales, murales grupales, teatralización, etc. Todas estas metodologías se trabajan en la Escuela Infantil Verbena con muy buenos resultados. No obstante, la metodología no lo es todo. Falta el contenido. Por eso el equipo docente del Verbena elaboró una lista de cuentos seleccionados con los que abordaron los temas de interculturalidad, solidaridad, respeto, tolerancia, y empatía.

Teresa nos habla sobre el cuento JAFTA, editado por INTERMÓN Oxfam:

"Tiene unas ilustraciones preciosas y es de una enorme ternura. Una de las cosas que trabajamos mucho con este cuento es darnos cuenta de que muchos de los sentimientos que tenemos nosotros, los tienen todas las personas. Porque el protagonista es un niño; en otras situaciones y otra realidad, pero es un niño. Sabe disfrutar, tiene una madre que le cuida, que le regaña cuando se porta mal, que le pone límites. Nos damos cuenta que es una madre como la nuestra. Igual que los sentimientos, que son los mismos."

A través de este cuento y otros cuentos se trabaja la empatía: "porque a veces parece que sólo los que estamos aquí somos los que sufrimos, disfrutamos... Se nos mueren dos personas a nosotras y a ellos se les mueren dos, y parece como que a ellos no les duele estas pérdidas, no sufren ese desgarro...Pero entonces nos damos cuenta de que a los niños nos duele las mismas cosas, nos gusta lo mismo estén donde estén (será una pelota de trapo o de goma de no sé qué, pero lo de dar una patada a un balón les gusta a todos....). Investigamos si ellos tienen un tipo de juego y nosotros otro. Pero a todos nos gusta jugar. Y para eso, este cuento nos vino muy bien".

La bibilioteca de la escuela acoge éste y muchos otros cuentos, algunos de los cuales se enumeran ahora:

- 'Manuela y la noche mágica', 'Manuela y el mar', 'Manuela en el Campo', 'Manuela en las fiestas', de Marta Osorio y Violeta Monreal. EDEBÉ. (El único libro con una protagonista niña gitana).
- 'Negro como el chocolate', de Teresa Giménez
- 'Todos somos especiales'. BEASCOA
- 'Un mundo de creencias' BEASCOA Un listado completo se encuentra en el anexo Memoria del Proycto 'Viva la Diferencia'