Sobre la demonización de las clases bajas
Los descalificativas como ‘choni’ o ‘cani’ son una forma de demonizar a la clases bajas en España. Así lo describen los periodistas José Durán e Ignacio Pato en un reportaje donde han preguntado a personas del mundo de la cultura y educadoras sociales sobre los mecanismos culturales que se usan para ridiculizar a los chavales y chavalas con menos recursos.
“Es posible que las clases más altas o las más ‘educadas’ utilicen más la microviolencia o mecanismos más perversos y difíciles de visibilizarporque no es correcto ser abiertamente sexista hoy en día”. Es lo que contesta una de las educadoras para apuntar que los discursos sexistas también atraviesan a las las clases más pudientes, sólo que son discursos más sutiles y más políticamente correctos,.“Las clases medias y burguesas tienen muchos más mecanismos para disfrazar o adornar lo que piensan”, concluye otra de las entrevistadas. Esto es extrapolable a los discursos racistas, no es políticamente correcto declararse abiertamente racista y las personas con más recursos camuflan la xenofobia con discursos más elaborados.
En el artículo advierte de una cultura de la excelencia que están implantando de forma muy peligrosa y que favorece “un reparto tremendamente injusto y clasista de los recursos educativos, tanto en Europa como por barrios y en cada centro. En los centros de zonas deprimidas, donde las madres y los padres son más precarios, es más difícil que se movilicen para exigir derechos, y esta carencia no se refuerza. Si no hay un buen tejido barrial que se corresponsabilice de estos chavales y chavalas con menos recursos, estarán excluidos”.
Puedes leer el reportaje aquí.