HELENA //
PRESIDENTA DE LA AMIPA

"El colegio es la casa de todos/as, un espacio donde todos aportan algo y todos aprenden algo"

Desde el AMIPA habéis impulsado el proyecto "Educar Juntos" para la convivencia de toda la comunidad educativa. ¿Cuál es el diagnóstico (carencias y potencialidades) desde el que partís para poner el marcha el proyecto?
El potencial es la propia comunidad educativa, que cree en la propuesta y la seria implicación de todos. La necesidad de reforzar y crear vínculos es lo que nos lleva a plantear el proyecto.
Las carencias son la falta de experiencias en este ámbito y el desconocimiento de algunos factores y, como siempre, los pocos recursos económicos con los que contamos. Aún así hemos podido hacer muchas cosas y hemos ido sumando aportaciones

¿Cómo planteáis la convivencia? habláis de una escuela inclusiva que tenga en cuenta la diversidad (cultural/social...), de compensar las desigualdades y de construir comunidad educativa en el barrio... Estas premisas forman parte de la propia declaración de principios del centro: la igualdad de oportunidades para todos es la base del trabajo. el referente ha sido la propia dinámica del centro en los 20 años que lleva en funcionamiento. Últimamente hemos sumado esfuerzos con otras entidades del barrio que comparten esta filosofía.

Antes de planificar las actividades del proyecto realizáis una encuesta con las familias para ver cuáles son sus principales intereses, ¿cuáles son las principales preocupaciones e intereses de las familias en los últimos años y cómo tratáis de darles respuesta?
Las propuestas de las familias son muy heterogéneas, van des de cuestiones muy lúdicas hasta ámbitos más técnicos, como la pedagogía, la sanidad o la alimentación. Buscamos especialistas para cada tema. Intentamos proponer un poco de todo para responder a la mayoría de los intereses. Todas las actividades son abiertas a todas las personas e intentamos que sean útiles y amenas. Aún así, siempre hay un sector de familias que no son especialmente receptivas.

Tenéis varias líneas de actuación. ¿Podrías contarnos la experiencia de alguno de estos talleres?
Las experiencias siempre son positivas. Por ejemplo, en el taller de cuentos una abuela venía unos días concertados a la escuela y contaba cuentos tradicionales (rondalles) a los alumnos. La acogida fue espectacular, la implicación de las familias en la dinámica educativa se percibe como un estrecho vínculo entre las dos realidades. Los niños consideran el centro como una extensión del ámbito familiar, el colegio es la casa de todos, un espacio donde todos aportan algo y todos aprenden algo. Creemos firmemente que ese es el modelo. No creemos que las comunidades de aprendizaje sean un fin sino un medio para conseguir esa cohesión del conjunto.

Otra de las líneas de actuación es la formación de padres y madres, ¿cómo se plantea esta formación?
Se trata de contactar con especialistas que impartan una charla participativa. Se localizan a través de contactos personales o a través de propuestas mas generalistas (cursos o ciclos en otros ámbitos) que coincidan con nuestros intereses.

En lo que respecta a la resolución de conflictos, ¿cuáles son los principales conflictos que les preocupan a las familias?
En lo que respecta a la resolución de conflictos, lo que más preocupa son las relaciones paterno filiales y como reconducir determinadas actitudes y comportamientos básicamente en el ámbito familiar. Los conflictos dentro del centro se resuelven con representantes de las partes afectadas (padres-alumnos-profesores-amipa). No se ha planteado crear una comisión de conflictos a raíz de estos talleres.

La participación de padres y madres en la educación es cada vez es más complicada (dobles jornadas, escasa cultura participativa...), ¿qué pensáis sobre esto? ¿qué diferencias veis entre la participación de los padres y el de las madres? ¿y entre las familias autóctonas y las que vienen de otros países?
La verdad es que cualquier tipo de actividad asociativa no remunerada es poco frecuente, en general, en nuestra comunidad. Desgraciadamente el tejido asociativo no es precisamente un modelo, aunque hay excepciones dignas de reconocimiento. La participación vista desde el punto de vista de género es desigual. El claustro de profesores y la junta de la AMIPA están formadas esencialmente por mujeres. Pero la participación en las actividades es más igualitaria en cuanto a género.
Si analizamos la implicación de familas son claramente mayoría las autóctonas. Este es uno de los ámbitos que tenemos previsto analizar y hacer propuestas para incorporar a los recién llegados.
Aunque sí que hay madres de otros países en la amipa y en la escuela de padres, no son muchas pero sí son muy activas. Los primeros pasos en la relación entre las familias y el centro lo genera el centro, y desde la amipa se intenta animar a las familias a formar parte de las diferentes propuestas de participación. Cualquiera es bienvenido. Pero somos conscientes de que la comunicación es mas difícil con las familias recién llegadas. y las realidades y necesidades y disponibilidad también. Así que tiempo al tiempo.

Teniendo en cuenta estas dificultades, ¿cómo planteáis la conciliación?
El servicio de guardería de la mañana está muy solicitado, tanto de forma sistemática (familias que dejan cada día a sus hijos) como de forma eventual. Creemos que es imprescindible, se ha convertido en una necesidad.

¿Cómo vais a darle continuidad al proyecto Educar Juntos?
Vamos a seguir con la fórmula propuesta y intentaremos diversificar la oferta de actividades a la vez que la implicación de aquellas familias que por diferentes motivos no son "usuarias del servicio". Este pasado junio (2009) se programó una jornada deportiva que ha sido un rotundo éxito y estamos planteando repetir la experiencia.

¿Tenéis contacto con AMIPAS de otros centros?
La relación más próxima la tenemos con los otros centros del barrio que se integran en la plataforma de entidades. A nivel de barrio somos pioneros en los proyectos (las AMIPAS de los otros centros son de reciente creación). La relación con otras AMIPAS es testimonial. Quizá sea una de las asignaturas pendientes el intercambio de experiencias con otras AMIPAS.